Hola a tod@s:
Hace un tiempo les conté sobre un callejero
que venia a los bajos de mi edificio y mi abuela le daba comida. Pues el
susodicho no solo se ha convertido en visita habitual, ya hasta aprendió cual
es la puerta de mi casa y si mi abuela se demora mucho en bajarle la comida
sube a escandalizar en el pasillo para que todos sepan que tiene hambre.
Dice mi abuela que es muy inteligente pero mi
mamá no está de acuerdo con ella, porque el difunto Federico subía hasta mi
balcón dando un tremendo recorrido, y este Rubio tonto solo supo cual era mi
puerta porque una vez mi abuela lo dejó subir para que comiera porque había
mucho frío en la calle.
A veces cuando abrimos la puerta entra en mi
casa y se esconde debajo de la mesa del comedor y no sale de ahí ni aunque vea
a mi abuela con su plato en la mano. Entonces mi mamá tiene que meterse debajo
de la mesa y él corre debajo de las sillas para no dejarse agarrar. Cuando mi
mamá logra capturarlo lo baja cargado porque si no se vuelve a esconder debajo
de la mesa. El Rubio es muy manso y nunca trata de arañarla, solo se asusta si
viene otra persona subiendo las escaleras.

Lametones a todos!!!
Dina
Pues luce mansito y buenote ,en fin un amiguito que debes conservar,hoy en día es difícil hacer amigos sinceros y ese detalle de apartarse de la comida para permitir que la gatita coma ,habla muy bien de el.Merlina
ResponderEliminarQué cosa más grandota y preciosa!! =)
ResponderEliminarCómo somos los rubitos de "tontones y buenazos"
ResponderEliminar... y guapos
... y miedosos!
¡lametones Dina!
En la primera foto parecía delgadito, pero en la segunda tiene pinta de ser un buen mozo... Ten cuidado, Dina, cualquier día tu mamá dejará que se quede debajo de la mesa ;)
ResponderEliminar